17 Sep Los 6 castillos entorno al Cañon del Rio Lobos
¿Te gustan los castillos? Esta semana dedicamos nuestro blog a los amantes de la historia, la cultura y el arte que desprenden los castillos. Y es que en la provincia de Soria tenemos un amplio catálogo. Concretamente, cerca de nuestro camping, en un radio de unos 30 kilómetros podemos disfrutar de seis. ¡Empezamos!
Castillo de Ucero.
Empezamos nuestra ruta de castillos a visitar en el de Ucero, el vigía de nuestras instalaciones. Esta espectacular construcción medieval se asienta sobre un promontorio rocoso que domina los valles del Río Lobos y Chico. De origen templario, la fecha de su construcción es dudosa ya que algunas fuentes lo datan en el s.XII, y otras en el s.XIII. Lo que sí sabemos con seguridad es que la zona ya estaba habitada desde la prehistoria y que está sobre los restos de un castro celtíbero.
Si ya resulta imponente, más debió serlo en la antigüedad, cuanto constaba de triple recinto amurallado, un foso y un puente levadizo. Hoy en día, todavía podemos recorrer y distinguir gran parte de sus estancias. Incluso los restos de un aljibe y un pasaje subterráneo que bajaba desde el castillo al río Ucero y que en la actualidad está en su mayoría derrumbado. Si queremos, podemos acceder andando, son apenas 2,5 kilómetros los que nos separan de él y la ruta circular no llega a los 5 kilómetros.
Castillo de El Burgo de Osma.
Ponemos rumbo al sur desde el camping, son unos 16 kilómetros los que tenemos que recorrer hasta llegar a esta preciosa villa. Esta fortaleza de origen cristiano fue mandada construir por Ramiro II de León en el siglo X durante la Reconquista para hacer frente a las tropas islámicas. El castillo alto tenía cuatro torres, dos preexistentes y las dos nuevas (una de ellas pentagonal y hueca). También tenía dos puertas, al norte y al sur, que permitían bajar hacia los rios Abión y Ucero para abastecerse durante los asedios. Con el paso de los siglos sufrió modificaciones y tuvo otros usos como por ejemplo el de cárcel. En la actualidad está siendo reformado y será visitable para el mes de diciembre.
Castillo de San Leonardo.
Nada tiene que ver esta construcción con el resto de las que ocupan este blog, dedicadas a la época de moros y cristianos. En San Leonardo de Yagüe, a 20 kilómetros, encontramos la primera fortaleza abaluartada de España. Mandado construir por Juan Manrique de Lara, Duque de Nájera, en el siglo XVI, se trata de un castillo señorial de planta cuadrada con patio interior y dos plantas. Tenía cuatro dependencias en sus esquinas con el interior también cuadrado. En la actualidad, a pesar de su avanzado estado de ruina, podemos distinguir algunas estancias como la capilla, cocinas o parte de las escaleras de caracol que comunicaban el polvorín con la parte superior donde estarían las piezas de artillería propias de la época.
Castillo de San Esteban de Gormaz.
De origen musulmán, es uno de los castillos claves, que cambiaron de manos continuamente durante los siglos X-XI. En el siglo XI pasa definitivamente a poder cristiano. Controlaba el paso por el Duero y vigilaba el puente sobre dicho río. Actualmente conserva un amplio lienzo de un grosor de unos dos metros. La construcción se realizó con sillares labrados, seguramente de procedencia romana. Cercano a la puerta de acceso, en el interior hay una gran oquedad, el Pozo Lairón. La construcción es alargada y estrecha, con restos de aljibes y obras subterráneas. A pesar de su estado de deterioro, bien merece una visita. Desde aquí puede verse a simple vista el castillo de Gormaz, siguiente parada en nuestra publicación.
Castillo de Gormaz.
Construido en los primeros años de la Reconquista sobre las ruinas de algún castro romano o edificación visigoda, fue un punto clave de la frontera de Al Ándalus. Durante cien años sería tomado y retomado por moros y cristianos en incontables ocasiones, tal era su importancia. Estamos ante uno de los castillos más importantes de Europa.
La fortaleza más grande de Europa
Este recinto amurallado tiene aproximadamente 1.200 metros de forma longitudinal y eje este-oeste, es el castillo califal más grande de toda Europa. Se distribuye en dos zonas claramente diferenciadas. Al este, tenemos el alcázar protegido por recios muros y torreones, con amplios restos arquitectónicos inferiores entre los que sobresale un gran aljibe abovedado. Al oeste, encontramos el área de la fortaleza destinada a albergar los ejércitos y el resto de la población antes de que esta lo abandonase y decidiera asentarse en las faldas de la montaña. Aquí hallamos los restos de una alberca, aunque lo más espectacular es la impresionante doble puerta de arco de herradura de tipo califal y que era la entrada principal. El perímetro está reforzado y protegido por 28 torreones y su comunicación con el exterior se realizaba por las dos magníficas puertas Califales y las dos Portonas secundarias que todavía hoy se reconocen.
Durante nuestro recorrido encontraremos numerosos paneles explicativos que harán más amena todavía nuestra visita. Además, podremos subir al paseo de ronda y las almenas de la parte del alcázar donde las vistas sobre la meseta nos dejarán atónitos. Ni qué decir tiene, que los atardeceres desde aquí dejarán en vuestra retina un recuerdo imborrable. Si quieres más información pincha aquí.
Castillo de Calatañazor.
Este castillo fue construido en el siglo XII y reformado en el siglo XIV. Actualmente en estado ruinoso, sobreviven algunos lienzos y parte de la torre del homenaje en lo alto de la villa. Por el lado de la población cuenta con un foso, mientras que por el valle de la Sangre la propia altura de los riscos ofrecía suficiente protección. La población también está amurallada y se conservan lienzos en el noroeste y sur, con una puerta pequeña. Este es un lugar emblemático ya que en el año 1002 el célebre caudillo musulmán Almanzor, sufrió la derrota en la que resultaría gravemente herido para después morir. De aquí nace el famoso dicho “Calatañazor, donde Almanzor perdió el tambor”.
Esperamos que os haya resultado interesante este artículo sobre los castillos en nuestro entorno y os animéis a visitarlos todos en vuestras vacaciones con nosotros.
¡Hasta la semana que viene!
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