5 pequeños pueblos sorprendentes a primera vista

08 Sep 5 pequeños pueblos sorprendentes a primera vista

Hola de nuevo amigos, hoy vamos a hablar de 5 pequeños pueblos sorprendentes a primera vista. Ya sabemos que son muchísimos los municipios bonitos y sorprendentes que podemos visitar, pero esta vez dedicamos nuestro blog a reducidos núcleos bastante desconocidos y que, sin esperarlo, llamaron nuestra atención. Iremos de norte a sur y esperamos poder descubrir más dentro de muy poco para contároslo.

Magaña

Nos vamos hasta el noreste de Soria cerca de la provincia de La Rioja. Situado en la Comarca de Tierras Altas, Magaña nos esperaba tras una serpenteante carretera de montaña. Nosotros íbamos desde Fuentes de Magaña y nuestra fascinación llegó al dejar una curva atrás y encontrarnos con un fantástico castillo en lo alto de un cerro. A sus pies veíamos la localidad. Si la primera impresión fue magnífica, cuando paseamos por sus calles y descubrimos la armonía en piedra que guardaba con sus casas nos enamoramos aún más. Hoy en día el pueblo se distribuye en 2 barrios, aunque llegó a tener 7. La iglesia de San Martín de Tours y la ermita de la Virgen de Barruso son sus monumentos religiosos más notables. No os podéis ir sin subir hasta la fortaleza y, si es posible, también hacer un recorrido desde los montes de alrededor para ver el conjunto desde diferentes puntos.

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Castillejo de San Pedro

No muy lejano del anterior, Castillejo de San Pedro se mimetiza tanto con el entorno que hasta de lejos es difícil de vislumbrar. La sorpresa llega cuando te das cuenta que justo ante tus ojos hay un pueblo perfectamente integrado en la montaña. Nos gustó su rusticismo, sus casas construidas con la piedra del entorno y que algunas de sus calles estuvieran sin adoquinar, lo que le hacía parecer anclado en el pasado. En nuestro descubrimiento, llegamos hasta allí a la caída del sol y pudimos ver unas espectaculares vistas sobre el valle con la luz dorada del atardecer.

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Valdelavilla

La fama ha llegado a Valdelavilla bajo el falso nombre de «Peñafría» y es que fue este el lugar elegido por Mediaset para rodar la serie de El Pueblo. La verdad es que no nos extraña porque rebosa belleza y encanto rural allá donde vayamos. En la línea de los lugares anteriores, la piedra salpica viviendas y callejuelas. En realidad estamos hablando de un núcleo urbano que fue abandonado hace décadas. Hoy en día es un complejo turístico con unas 12 casas para alquilar. El enclave donde se situa es parte de su encanto pues es territorio de montaña con una frondosa vegetación. Si lo queréis visitar, os recomendamos informaros antes de ir puesto que si es temporada de rodaje el acceso no está permitido.

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San Felices

Sólo el nombre ya nos dice como tienen que vivir sus habitantes… No nos extrañaría lo más mínimo porque es un sitio con unas vistas de escándalo. Lo encontramos junto a la frontera con La Rioja sobre el valle del río Alhama. Podríamos decir que el pueblo en sí, lleno de calles estrechas y empedradas (como sus casas), es un continuo espectáculo visual. Lo que más nos gustó fue su mirador, pero no podemos olvidarnos de las aguas cristalinas del río Alhama y de su puente medieval.

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Caracena

Bajamos al suroeste para concluir el blog de hoy. Caracena sobrecoge por su modestia y sencillez. Es increíble como un pueblo tan pequeño y con tanta relevancia histórica puede resultar tan poco conocido. Además, es un municipio repleto de patrimonio. Para lo reducido que es, allí encontramos 2 iglesias románicas (una de ellas con galería porticada), un rollo de justicia, una antigua cárcel, un puente medieval muy codiciado a lo largo e la historia y todo esto rematado por un grandioso castillo ubicado al filo de lo imposible. La guinda al pastel la pone la posibilidad de realizar una ruta senderista por el Cañón del río Caracena que une dicha localidad con la de Tarancueña.

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¡Hasta pronto campistas! Gracias por leernos, no os olvidéis de compartir y dejar vuestros comentarios 😉