Berzosa y su atardecer románico

28 May Berzosa y su atardecer románico

¿Qué tal campistas? Esta semana dedicamos nuestro blog a Berzosa y su atardecer románico. Ese precioso arte que nos rodea y que se encuentra escondido en multitud de pueblos cercanos. Concretamente hoy vamos a hablar de la iglesia de San Martín de Tours con una bonita galería porticada. Situado a unos 15 km de nuestro emplazamiento, tras pasar Ucero en dirección a El Burgo de Osma cogeremos el cruce hacia Nafría de Ucero. Seguidamente tomaremos la bifurcación que nos lleva hasta Valdealbín y después llegaremos a nuestro destino. Muy cerquita y muy fácil.

Berzosa es una pequeña y acogedora villa de callejuelas en cuesta muy cercana a El Burgo de Osma. Para acceder hasta uno de sus tesoros más preciados deberemos subir hasta arriba del pueblo donde nos espera este monumento declarado Bien de Interés Cultural. Esta iglesia comenzó a construirse en el siglo XI. La galería, como pasó en muchos de los templos coetáneos, sería añadida después, concretamente a finales del siglo XII. El resto de las edificaciones que podemos ver hoy en día se deben a una reforma llevada a cabo durante el siglo XVIII.

Uno de los detalles que más nos gusta es que se halla en el centro de una considerable explanada de verde hierba. Desde este lugar apenas se ve el resto de casas del pueblo, pero si tenemos una fantástica panorámica de la lejanía y los campos de cultivo.

Los detalles

Nos acercamos para examinar los detalles que las piedras talladas nos ofrecen. No somos grandes entendidos, pero sabemos apreciar la belleza. La puerta consta de 3 arcos con una ornamentación bastante simple pero igualmente hermosa. Esa decoración en forma de pequeños cuadrados que encontramos se llama ajedrezado y es una de nuestras favoritas. Después de observar la puerta nos giramos para admirar su galería. Tiene 7 arcos de los cuales el del centro constituye a la vez el acceso. Como hemos hecho los deberes antes de venir, nos hemos documentado y sabemos que sus robustas columnas son de cuádruple fuste y talladas en un solo bloque. Unas de las más bonitas que hemos visitado hasta el momento.

Nosotros despedimos desde aquí la entrada de hoy, viendo el atardecer desde tan privilegiada posición. Si nos aceptas la sugerencia, visítala por la tarde y quédate a ver la puesta del sol. La panorámica del horizonte, la luz del ocaso y la magia del románico te regalarán una estampa única.

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